Twitter sigue intentando mejorar su servicio para evitar la difusión de noticias falsas y contenido manipulado. Y es que la red social de microblogging ha anunciado una serie de cambios en sus políticas en relación al contenido multimedia sintético y manipulado que tenga intención de causar daño, eliminando este tipo de contenidos o facilitando información sobre el contexto o una advertencia.
Esta nueva medida empezará a funcionar a partir del 5 de marzo y pretende incorporar nuevas reglas que, según ha indicado Twitter, incluye el no poder “compartir de manera engañosa contenidos sintéticos o manipulados con el objetivo de causar daño”.
Otra de las medidas que adoptará Twitter es la que etiquetar contenidos multimedia sintéticos y manipulados para dar información a la gente sobre su autenticidad y proporcionarles contenido adicional.
Esta decisión no ha sido tomada de forma unilateral, sino que la compañía, como ha indicado en una entrada en su blog oficial, ha consultado a usuarios y expertos para poder llevarla a cabo. En este estudio que ha realizado Twitter se ha descubierto que un 70 por ciento de las personas que usan Internet considera “inaceptable” no actuar en contra de los contenidos manipulados y nueve de cada diez se mostraron a favor de poner etiquetas de advertencia junto a un contenido multimedia manipulado.
Ahora bien, Twitter también incluye la posibilidad de que se eliminen estos tuits con contenido manipulado, aunque esta opción ha generado más debate al estar en peligro la libertad de expresión. En este sentido, los resultados del estudio realizado por la red social concluyen que el 90 por ciento de los usuarios estarían a favor de eliminarlo siempre y cuando el contenido está destinado a causar cierto tipo de daño.
En relación al mensaje de advertencia que podría incluir Twitter en estos contenidos manipulados, la red social explica que se podrían poner una serie de advertencias para informar a los usuarios cuando le den a me gusta o cuando retuiteen el contenido y así, intentar darle menor visibilidad a ese contenido.
El contenido multimedia sintético y manipulado es, según ha explicado la compañía, “cualquier foto, audio o vídeo que haya sido significativamente alterado o creado con la intención de engañar a las personas o cambiar su significado original”. A este tipo de contenido se le ha llamado deepfakes y ya están siendo combatidos por Facebook, que los prohibió hace meses. Eso sí, este tipo de prohibiciones no afectarían a los memes o montajes con fines paródicos o humorísticos.
Twitter ha explicado también qué tipo de contenido considera que ha sido manipulado y que podría incluirse en este ámbito. Se trata de material que ha sido “sustancialmente editado” en un modo que “altera significativamente su composición, secuencia, tipo o encuadre”. También incluyen los contenidos visuales o sonoros, como por ejemplo subtítulos o un audio editado, que haya sido añadido o eliminada.
La red social tendrá en cuenta el contexto en el que se ha compartido la foto, el video o el audio, ya que tendrá la capacidad de distinguir entre aquello que pueda generar confusión o un malentendido y los que tengan como objetivo engañar a la gente de manera deliberada sobre la naturaleza o el origen del contenido.
También se tendrá en cuenta los metadatos o el propio perfil de la cuenta que ha publicado el mensaje.
En cuanto a los mensajes que podrán ser eliminados estarán, principalmente, vinculados al hecho de que quieran causar daño a determinadas personas o colectivos, entendiéndose como tal aquellos que incluyan amenazas a la seguridad física de una persona o grupo o a aquellas que afecten a la privacidad o a la habilidad de una persona o grupo a expresarse libremente o a participar en un evento.
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